EJERCICIO PARA ANCLAR LA PRESENCIA YO SOY EN TU SER Y MANTENERTE EN PROTECCIÓN DIVINA

Este ejercicio fortalecerá tu conexión con la Presencia Yo Soy, asegurando que tu vibración se mantenga elevada, protegida y alineada con la perfección divina en todo momento.

1. PREPARACIÓN Y CONEXIÓN INTERNA

Encuentra un lugar tranquilo y adopta una postura cómoda.
Cierra los ojos y respira profundamente tres veces, sintiendo cómo la paz te envuelve.
Visualiza un pilar de luz dorada descendiendo desde lo alto y entrando por tu coronilla, llenando todo tu cuerpo de energía radiante.

Decreta mentalmente o en voz alta:

"Yo Soy la Presencia Divina anclada en mi ser. Yo Soy la luz, Yo Soy la perfección, Yo Soy la protección absoluta. Nada que no sea luz puede tocarme."

Siente cómo esta afirmación activa en ti un campo de fuerza poderoso.

2. EXPANSIÓN DE LA PRESENCIA YO SOY

Visualiza cómo esa luz dorada se expande desde tu corazón, irradiando en todas direcciones.
Siente cómo crece y se convierte en un sol radiante dentro de ti, envolviendo cada célula de tu cuerpo en vibración pura.

Ahora decreta con firmeza:

"Yo Soy la Presencia Yo Soy en acción. Mi luz es invulnerable, perfecta y eterna. Solo el bien puede manifestarse en mi mundo."

Permanece en esta visualización por unos momentos, permitiendo que la energía de tu Presencia Yo Soy te llene completamente.

3. SELLADO DE PROTECCIÓN Y AUTORIDAD ESPIRITUAL

Para consolidar este estado elevado y asegurar que la energía discordante no tenga acceso a tu ser, decreta:

"Yo Soy un campo de luz invencible. Todo lo que se acerque a mí es elevado a la perfección divina. Nada discordante puede entrar en mi mundo. Así es, así será."

Siente cómo la luz de tu Presencia Yo Soy crea una barrera de protección inquebrantable a tu alrededor.

4. CIERRE Y ANCLAJE EN LA VIDA DIARIA

Coloca tus manos sobre tu corazón y repite mentalmente:

"Yo Soy la luz, Yo Soy la paz, Yo Soy la presencia divina guiando mi camino."

Respira profundamente y, cuando te sientas listo, abre los ojos.

CONCLUSIÓN

Este ejercicio de anclaje te permitirá:

• Mantenerte en vibración elevada durante el día.
• Reforzar tu protección y conexión con la divinidad.
• Actuar desde la sabiduría y la armonía de tu Presencia Yo Soy.

Al practicarlo con frecuencia, notarás cómo tu energía cambia y cómo las situaciones externas comienzan a alinearse con la perfección divina.