Elimina de ti el “no puedo, no tengo” | Saint Germain
¡Las palabras “no puedo” o “no tengo” tienen que ser eliminadas permanentemente de todo estudiante diligente de la Luz!
Cuando lleguen a saber que la Magna Presencia Viviente de Dios es la Energía de Vida que fluye a través de sus mentes y cuerpos, tendrán que convencerse de que ya no hay más excusa para utilizar tales palabras.
Estas palabras son sencillamente maquinaciones del ser externo de los hombres para tratar de autojustificarse cuando, debido a sus propios actos, han cerrado la Puerta de la Luz a sí mismos y a su mundo.
Al haber llegado a la plena estatura de la naturaleza humana en Cristo, deberíamos ser capaces de poner de lado todo infantilismo de dudas y temores, y saltar a los brazos de esa Majestuosa “Presencia” Conquistadora en la Vida de todo individuo; y aceptar Su plena Presencia Manifestadora. La firme aceptación de la Ilimitada Presencia y Actividad de Dios, manifiesta en tu experiencia externa, es un Poder que hace milagros, y que ha estado esperando durante mucho tiempo para verter Su gran Abundancia y ponerla a tu disposición.
Todas las dudas y temores humanos están siendo rápidamente consumidos y eliminados, y eso hace posible que esta gran Abundancia Interna se abalance como un poderoso torrente, llevando en Su Abrazo la plenitud de la “Presencia de Dios” a tu uso y experiencia. Dale conscientemente el pleno poder a este sentimiento con toda la alegría que tengas a tu disposición: “Cuán verdadero y maravilloso es todo ahora en mi vida y mundo”
Esta es una ilustración de las cosas tremendas que pueden hacerse; y lo que entraña cuando se realizan esfuerzos sinceros para mantener la paz y la armonía en la conciencia. Si cada uno de estos individuos pudiesen sentir la plena importancia de esta gran verdad, maravillas podrían tener lugar en sus experiencias —y tendrán lugar con esta plena aceptación. Esto no constituye un deseo de entrometerle nada al libre albedrío del individuo, sino que es una afirmación de hechos y de la Verdad Eterna concerniente a estas Manifestaciones Superiores. Cuando encontramos que hay Hijos de Dios que aceptarán, con toda confianza, pequeños encargos, entonces con el tiempo se encontrarán recibiendo encargos cada vez mayores. Nadie conoce su propia fortaleza hasta que los Fideicomisos Sagrados le son confiados.
Tomado del libro: Instrucción de un Maestro Ascendido – Saint Germain